Los nanogrados aterrizan en España en el mundo de la construcción

30 Abr Los nanogrados aterrizan en España en el mundo de la construcción

La transformación digital tiene grandísimas ventajas asociadas, pero su crecimiento exponencial también ha demostrado la existencia de algún inconveniente como, por ejemplo, el estancamiento de determinados grupos profesionales. ¿Hay una solución para ello? La respuesta afortunadamente es afirmativa: los denominados nanogrados representan toda una revolución en este sentido. Se trata de «cursos, de carácter colaborativo y personalizables» que permiten «democratizar la educación» enfocándose más en las habilidades que en los conocimientos.

¿Cuándo nacieron los nanogrados?

Creados en 2012 con el nacimiento de la popular plataforma Udacity, los nanogrados no son una idea nueva. Se los conoce como minicarreras «similares a un MOOC (Massive Online Open Courses)», tal y como explican en este artículo, y que suelen estar relacionadas con las nuevas tecnologías. Otro dato importante es que -generalmente- no es necesaria una experiencia previa.

¿Por qué hablamos ahora de nanogrados?

Porque la Fundación Telefónica y la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ya han presentado, bajo el paraguas de su proyecto ‘Profesionales 4.0’, su primer nanogrado: «Construcción 4.0». Tal y como explican desde la propia fundación está «destinado a impulsar la digitalización» en este sector, donde las competencias digitales son cada vez más demandadas.

Un tipo de nanogrado que ha cobrado todavía más protagonismo debido a la situación originada por el Covid-19 que «ha puesto de manifiesto la necesidad de digitalización de los sectores productivos en nuestro país». «Actualmente casi la mitad de la población española todavía carece de competencias digitales», argumenta la Fundación Telefónica, alertando que se trata de un potencial riesgo de exclusión en el contexto laboral post-pandemia.

Puesto en marcha de la mano de la mano de la Fundación Laboral de la Construcción, consta de siete módulos flexibles y 220 horas de formación en las que se tocarán algunas herramientas tan imprescindibles como analítica web, Big data o metodología BIM.

¿Tiene sentido digitalizar la construcción?

Hace tiempo que la pregunta perdió cierto sentido, pero sí que resulta conveniente aprovechar el lanzamiento de este nanogrado para recordar que el informe ‘Digitalización en el sector de la construcción: la revolución en marcha’ de la consultora multinacional Oliver Wyman ya reseñó que la transformación digital de la construcción «podría suponer hasta un 25% de ahorro en costes, ya que la información aportada ayudará a generar mejoras, ser más eficientes y optimizar recursos», apuntan las mismas fuentes.

De hecho, había muchas esperanzas puestas en el año 2020 de cara a la digitalización. Y es que a pesar de que la construcción es mundo complejo y amplio, con trabajos que abarcan desde faraónicos proyectos trazados con precisión en un despacho hasta a los profesionales de pequeños gremios, ya existen proyectos que habían enseñado el camino, tal y como relatamos en este artículo.

Además del ahorro de costes, no se puede obviar que los procesos automatizados, las etapas constructivas definidas desde el proyecto, dejar los retrasos en el olvido o el mejor aprovechamiento de los materiales son solo otras de las ventajas que no se deben perder de vista. Y todas ellas encontrarán mucho más futuro y recorrido cuando la Inteligencia artificial, el modelado 3D o incluso el uso de drones avance con más fuerza.