¿Qué significa construir bien para el bienestar?

¿Qué significa construir bien para el bienestar?

Las empresas que formamos parte de Consolis comenzamos a escribir un nuevo capítulo en septiembre de 2021. Fue el momento elegido para lanzar una nueva imagen corporativa y resaltar que, entre nuestras metas principales, queremos tener un papel protagonista en la sociedad haciendo lo que mejor sabemos: construir bien para que las personas puedan disfrutar de edificios, naves, viviendas o instalaciones deportivas inmejorables. Aquí lo explicamos con más detalle.

Para entender el concepto de «construir bien para el bienestar» hay que pararse a pensar en elementos tan familiares como un hospital, una universidad o un parking. Son solo tres ejemplos, pero la lista podría ser mucho más extensa: edificios de viviendas recientes, las naves que componen una plataforma logística o incluso granjas. Cualquiera de los mencionados se puede abordar y construir con soluciones prefabricadas.

Es decir, el objetivo está claro: creamos espacios para vivir, trabajar o disfrutar mejor. Pero esta visión no abarca solo el aspecto emocional, también conseguimos que la sociedad viva mejor porque mediante la construcción industrializada conseguimos ejecutar obras más rápidas, resistentes, rentables y sostenibles.

Construir bien con prefabricados

¿Por qué hablamos de bienestar?

Porque las obras con prefabricados son seguras y con una vida útil muy larga. Cuando ya se han construido, las personas ahorran, por ejemplo, en mantenimiento. Y una vez que han alcanzado su límite de vida, los materiales se reciclan y vuelven al círculo de producción para garantizar que contribuimos cada día a un mundo más verde, con menos emisiones y mayores tasas de reciclaje.

Insistiendo en el plano medioambiental, los números nos respaldan: el hormigón prefabricado necesita menos cemento que el tradicional, así que las emisiones de Co2 se reducen hasta un 40%. En el caso de Consolis, gracias a la innovación y el uso de tecnologías punteras conseguimos elevar este porcentaje hasta el 75%. Y seguiremos trabajando hasta que podamos decir que somos neutros climáticamente.

Hablamos de bienestar porque una obra industrializada, en comparación con los sistemas de construcción tradicionales in situ, se gestiona en mucho menos tiempo. Este motivo puede parecer nimio, pero nada más lejos: todo el mundo es consciente de que las obras generan molestias. Optando por el modelo que abanderamos en Consolis hacemos que el entorno donde se realizan los trabajos sufran ruidos, molestias y suciedad por mucho menos tiempo.

Otro detalle: el control y la flexibilidad del hormigón prefabricado pasa bastante desapercibido. ¿Pero no es fantástico poder ejecutar un proyecto tal y como lo habías imaginado? Losas, muros, paneles GRC… Todo está pensado para adaptarse por completo a lo que demanda un cliente. Aquí puedes ver que damos forma a los materiales hasta convertirlos justamente en lo que quieres y que los límites, a día de hoy, todavía no se conocen.

Dos ejemplos fantásticos de bienestar

El Hospital de Alta Resolución de Estepona fue la obra más importante de los últimos 10 años en esta zona de la costa andaluza. Se levantó con la idea de convertirlo en un punto de referencia en el que atender 85.000 consultas, 91.000 urgencias y 4.000 operaciones cada año. Puesto en marcha de forma escalonada, ya existe un balance del primer año de vida (cumplido en febrero de 2022): desde este hospital se han gestionado 26.119 consultas y pruebas.

La mejor muestra de que está construido para el bienestar de los pacientes que acuden a él la encontramos en la dotación: el servicio de Oftalmología comenzó su andadura en enero de 2022 incorporando equipos diagnósticos de última generación, biometría óptica, retinógrafos o salas limpias para el primer tratamiento intravítreo.

Ahora, para finalizar, viajamos hasta Hungría, donde también en 2022 comenzó a disfrutarse del pabellón deportivo más grande de este país y de Europa. El MVM Dome se levantó para albergar el Campeonato de Europa de Balonmano 2022 y sirvió para que equipos y público (la capacidad supera los 20.000 espectadores) pudieran ver y practicar su deporte favorito en unas instalaciones de auténtica referencia.

ASA Hungría fabricó las vigas de las gradas, las galerías, los suelos interiores en voladizo y también las escaleras que componen el complejo. ¿El resultado? Un espectáculo de las dimensiones que se pueden ver en este vídeo.